viernes, 28 de agosto de 2009

Es hora de actuar!!

En el preámbulo de la agenda 21 propuesta por las Naciones Unidas, se sintetiza tanto los verdaderos problemas a los que nos enfrentamos las generaciones actuales a nivel mundial, como los objetivos que debemos perseguir. Para un análisis a fondo de esta propuesta, es indispensable citar el primer párrafo completo, el cual contiene una serie de argumentos que nos llevan a reflexionar y aclarar el concepto de un auténtico “desarrollo sostenible”:


“La humanidad se encuentra en un momento decisivo de la historia. Nos enfrentamos con la perpetuación de las disparidades entre las naciones y dentro de las naciones, con el agravamiento de la pobreza, el hambre, las enfermedades y el analfabetismo y con el continuo empeoramiento de los ecosistemas de los que depende nuestro bienestar. No obstante, si se integran las preocupaciones relativas al medio ambiente y al desarrollo y si se les presta más atención, se podrán satisfacer las necesidades básicas, elevar el nivel de vida de todos, conseguir una mejor protección y gestión
de los ecosistemas y lograr un futuro más seguro y más próspero. Ninguna nación puede alcanzar estos objetivos por sí sola, pero todos juntos podemos hacerlo en una asociación mundial para un desarrollo sostenible.” [1]
No podemos quedarnos con los brazos cruzados, los problemas antes mencionados se acentuarán cada vez más si no tomamos medidas para combatirlos. Es hora de dejar las diferencias políticas e ideológicas a nivel mundial y unirnos para arreglar el mundo que, a lo largo de los años, la humanidad ha deteriorado tanto. No ganamos nada con arrepentirnos ni buscar culpables del deterioro ambiental, la mala distribución de riquezas, y decisiones egoístas que han llevado a nuestro planeta, nuestro hogar, a una destrucción paulatina. Dejemos atrás el pasado y unámonos para buscar un verdadero desarrollo antes de que sea tarde, es hora de actuar!!!
[1] http://www.un.org/esa/dsd/agenda21_spanish/res_agenda21_01.shtml

jueves, 27 de agosto de 2009

¿Qué es la Agenda 21?



La Agenda 21 o Programa Global para el Desarrollo Sustentable en el siglo XXI surge de la conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y Sustentabilidad, celebrada en Río de Janeiro en Junio de 1.992, más conocida como Cumbre de la Tierra, constituye un programa de acción a aplicar a lo largo del siglo XXI por los gobiernos, en todos los niveles, por las ONG y demás instituciones de la sociedad civil, con el apoyo de las Naciones Unidas, y por las demás instituciones multilaterales y nacionales de fomento del desarrollo socioeconómico, con el objeto de hacer viable la adopción del desarrollo sustentable y ambientalmente racional en todos los países.
Se trata de una herramienta más dentro de la estrategia global que busca un modelo de crecimiento económico y social basado en el Desarrollo Sustentable, aquél que busca satisfacer las necesidades presentes, es decir de las generaciones actuales, sin comprometer las generaciones futuras.
Dicho programa sienta las bases para desarrollar estructuradamente una política global que permita alcanzar el desarrollo sostenible, es decir, la integración de los aspectos:
Sociales, referidos a la equidad o justicia social en las necesidades sociales de las personas, como son la educación, la salud, la vivienda, o la cultura y la participación ciudadana
Económicos, mediante un modelo económico que aporte oportunidades de empleo.
Ambientales, en relación a la conservación, cuidado y respeto por el entorno y los recursos naturales. [1]
Es de suma importancia estudiar las acciones del gobierno y la sociedad en general en nuestro país para cumplir las metas que propone la Agenda 21 a nivel mundial. De igual manera, conocer los planteamientos de este Programa Global nos permite deducir pautas para, como economistas, tomar las mejores decisiones. Una de las cosas que a veces olvidamos es la profunda relación que tienen los aspectos sociales, económicos y ambientales y que, al tomar una medida que afecte a uno de esos aspectos, ésta traerá consigo consecuencias directas o indirectas sobre los dos restantes. Espero las siguientes entradas nos ayuden a comprender esta estrecha relación y los ejemplos presentados sirvan de inspiración para crear en los lectores iniciativas que nos lleven a un verdadero desarrollo sustentable.
[1] www.fundacionsustentable.org/contentid-61.html

sábado, 22 de agosto de 2009

Fragmento de "LA ANATOMÍA POLÍTICA DEL DESARROLLO SOSTENIBLE" del Autor Wolfgang Sachs


Resumen:

CRECIMIENTO PARA EL AMBIENTE
Hace varios años, la protección ambiental era vista como un enemigo del crecimiento; en la actualidad, la gran mayoría de los representantes de la industria se han interesado en asumir esta responsabilidad. Salvar el ambiente generará enormes costos, atender la crisis es un gran desafío para la economía ya que se debe acumular e invertir capital con el objetivo de buscar tecnologías que generen la misma producción, pero con menos contaminación y menos consumo de la naturaleza. Estas innovaciones ya están ofreciéndose, se han creado instalaciones anticontaminadoras (scubbers), procesos de limpieza (biotecnología), tecnologías para reciclar y monitorear, así como mecanismos de regulación de procesos y la producción. De igual manera, las esperanzas están puestas en nuevas tecnologías de producción de energía (tecnología basada en hidrógeno y reactores nucleares). Todo esto con el propósito de fortalecer el aparato industrial, al mismo tiempo que se supera la degradación ambiental, para así lograr un verdadero crecimiento económico.


EL SUR COMO UNA ARENA DE AJUSTE AMBIENTAL
La “perspectiva fortaleza” (una de las interpretaciones del desarrollo sostenible) persigue la meta estratégica de minimizar la carga del norte con respecto al coste del ajuste ambiental y pasar este coste al sur. En los 70’ las conferencias multilaterales se enfocaban en la redistribución de las riquezas y en lograr una participación más amplia del Tercer Mundo en el crecimiento de la economía global. A partir de los 90’, estas conferencias han cambiado su centro de atención, ahora tienen como prioridad la redistribución de los riesgos, buscando responsables del deterioro ambiental, y se preguntan ¿cómo controlar las graves consecuencias producidas por el crecimiento económico a nivel global?.
Dentro de esta perspectiva, el sur es el que debe actuar de una manera más responsable, mientras que el norte es el hogar de la razón, la estabilidad y la limpieza. Peligros ambientales, pobreza y desestabilización, son vistos como problemas que tienen sus orígenes en el Tercer Mundo, y no como parte de efectos globales del norte. El creciente número de la población también es visto como un problema para el norte, ya que genera amenazas como la inseguridad ambiental y la migración. Se urge buscar estrategias para controlar los problemas mencionados.
La Agenda 21 (Plan de Acción de las Naciones Unidas), divide el mundo ecológicamente en países del déficit (resultado de la insuficiencia de capital, tecnología atrasada, carencia de conocimientos y disminución del crecimiento económico) y países de alto rendimiento. Se tiende a proyectar en el sur la responsabilidad de los problemas ambientales; la solución: el norte debe incrementar sus inversiones en el sur, transferir tecnología y conocimientos hacia esta región, sólo así podrá contribuir a su crecimiento.

Comentario:

Es de suma importancia que las industrias se preocupen del deterioro ambiental y que esté desapareciendo la idea de que implementar medidas para la producción con el objetivo de evitar destruir el medio ambiente, es simplemente una exigencia externa que recae en más costos de producción. Es necesario que, a nivel mundial, se priorice la idea de que la protección del medio ambiente va de la mano con el crecimiento económico. Si las industrias adoptan medidas ecológicas en el proceso de producción, los beneficios de éstas se verán a largo plazo ya que podrán seguir con su producción habitual sin externalidades como el deterioro de su entorno, el cual afecta directamente las condiciones de producción no sólo en un campo específico, si no a nivel global.
Con respecto a la perspectiva fortaleza, es oportuno citar una frase del autor: “una vez más el sur es presentado como el hogar de la incompetencia y el norte como la fortaleza de la excelencia”. [1] A mi criterio, la perspectiva fortaleza persigue una meta equivocada, los países desarrollados deben empezar a pensar de manera global; ciertamente, varios de los problemas socioeconómicos que tienen más incidencia en el tercer mundo afectan de una u otra manera a los países industrializados; sin embargo, las decisiones equivocadas de algunos de los países del norte también han dado a origen a muchos de los problemas globales que vivimos en la actualidad.
“Según la investigación, llevada a cabo por la organización Monitoreo del Carbono para la Acción (CARMA), Estados Unidos produce una cuarta parte de las emisiones de dióxido de carbono en el planeta”[2]. No podemos ignorar esta realidad y cargar la responsabilidad y consecuencias únicamente a los países tercermundistas. Debe existir una vigilancia constante para que todos los países respeten los tratados internacionales para regular las emisiones de dióxido de carbono y adoptar tecnologías con el objetivo de salvaguardar el medio ambiente.
El cuidado del planeta en que vivimos es tarea de todos, es necesario pensar en función de las generaciones futuras. Las decisiones de un país, del norte o del sur, afectan de alguna manera a todo el mundo; por tal razón, todos los representantes a nivel mundial deben velar para que el sur no sea la única “arena de ajuste ambiental”.

[1] SACHS, Wolfgang, “La Anatomía Política del Desarrollo Sostenible”